Escrito por Stefanie Campos
Mercadeo e Imagen Corporativa | Grupo Merelec
Nuestra generación ha sido testigo de la creciente preocupación por el cambio climático, este tema despierta polémicas en muchos ámbitos de la realidad social, política y empresarial.
No hay duda de que la urgencia por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero es un tema que nos compete a todos.
En este contexto, la descarbonización de la industria productora de energía eléctrica ha emergido como una herramienta para combatir el calentamiento global y se ha convertido en una estrategia fundamental para alcanzar la sostenibilidad, que tal como su nombre lo indica asegura las necesidades del presente sin comprometer las necesidades de futuras generaciones.
El planteamiento de descarbonizar la energía surge de la estrecha relación entre la generación de energía y las emisiones de gases.
La quema de combustibles fósiles, como el carbón y el gas natural, ha sido históricamente la principal fuente de generación eléctrica, pero también son algunas de las principales causas del aumento de las concentraciones de dióxido de carbono en la atmósfera.
¿Podría tu organización ejercer un rol de cambio en este fenómeno mundial?
La respuesta es afirmativa, y se vuelve importante destacar que la descarbonización de la energía no se trata solo de la generación per se, también involucra las prácticas de eficiencia y la gestión inteligente de la demanda.
La eficiencia energética desempeña un papel fundamental al reducir el consumo de electricidad y maximizar el rendimiento de los sistemas energéticos.
En este punto las empresas privadas a nivel mundial se han organizado en iniciativas importantes que demuestran su pujante compromiso por hacer un uso más razonable de la energía.
Por otro lado, existe una posibilidad más robusta para tu organización, que le permite complementar las prácticas de eficiencia energética con un apoyo directo a la industria de la generación renovable.
Aunque tu organización no tenga las posibilidades financieras o técnicas de invertir en el auto-abasto de energía limpia, puede utilizar mecanismos que fomentan la generación renovable, como es el caso de los Certificados de Energía Limpia bajo el I-REC Standard.
Para lograr las metas de descarbonización del sector eléctrico, es necesario implementar una combinación de políticas públicas, inversiones y tecnologías. Algunas de las acciones clave incluyen:
- Fomento de las energías renovables: Las inversiones en energía solar, eólica, hidroeléctrica y otras fuentes renovables deben aumentar significativamente. Esto implica la creación de marcos regulatorios y financieros favorables, así como la eliminación de barreras para su adopción.
- Inversión en infraestructura y almacenamiento: La descarbonización requiere una infraestructura eléctrica moderna y flexible, así como el desarrollo de tecnologías de almacenamiento de energía para garantizar un suministro constante y confiable.
- Promoción de la eficiencia energética: Mejorar la eficiencia en la demanda de electricidad a través de prácticas y tecnologías eficientes ayuda a reducir la necesidad de nueva capacidad de generación y a maximizar el uso de fuentes renovables existentes.
- Investigación y desarrollo tecnológico: La inversión en investigación y desarrollo de tecnologías de generación, almacenamiento y gestión de energía es fundamental para avanzar hacia un sistema eléctrico más limpio y eficiente.
La descarbonización de la energía es un desafío global, pero también representa una gran oportunidad para construir un futuro más sostenible y resiliente.
La transición hacia una matriz eléctrica descarbonizada requiere la colaboración de gobiernos, empresas y la sociedad en su conjunto.
Al tomar medidas concretas y trabajar juntos, podemos lograr una electricidad limpia y contribuir significativamente a la lucha contra el cambio climático, si quieres dar el primer paso, visita https://www.mercadoselectricos.com.sv/green-management/.